Los votos son decretos que hicimos en vidas pasadas y que nos están afectando negativamente en nuestro presente.
Pueden ser sucedáneos de juramentos, pactos, promesas y contratos.
Pueden ser votos conscientes o inconscientes.
Podemos haberlos activado de manera verbal o mental.
Todos estos votos se han realizado después de una experiencia traumática o por voluntad propia.
Los votos tienen una característica, y es que se activaron con mucha fuerza en el momento en que se dijeron y se creó una certeza que puede perdurar en tu vida de hoy. obstaculizando tu vida actual e impidiendo disfrutar de aquello a lo que prometiste renunciar.
Ejemplos de votos, juramentos, promesas, contratos y pactos que hemos realizado en otras vidas:
"Nunca más tendré pareja".
"Jamás confiaré en los demás"
"No pienso tener más hijos"
"Me tomo muy en serio mi voto de pobreza en la vida religiosa"
"Hasta que la muerte nos separe"
"Jamás hablaré de esto con nadie"
"Obedezco a la religión por encima de todas las cosas"
"Nunca te dejaré"
Te invito a cortar de raíz estos votos para que puedas disfrutar de aquello que ahora mismo no puedes gozar, ya sea el tener pareja, hijos, abundancia, salud o una sexualidad plena.